“La Caída”
En la vida, todos nos enfrentamos al sufrimiento, a los males en la naturaleza y, sobre todo, a la cuestión del mal moral. Nos preguntamos: ¿De dónde viene el mal? En este blog, exploraremos esta profunda pregunta desde la perspectiva de nuestra fe católica. Descubriremos cómo la búsqueda del origen del mal encuentra su solución en la conversión al Dios vivo y en la revelación del amor divino en Cristo
Dios es infinitamente bueno y todas sus obras son buenas. Sin embargo, san Agustín, en sus Confesiones, expresó su propia experiencia de buscar el origen del mal y no encontrar una solución. La realidad del sufrimiento y del mal moral plantea interrogantes difíciles de responder. Pero es en la luz del “Misterio de la piedad” que se esclarece el “misterio de la iniquidad”
La revelación del amor divino en Cristo nos muestra tanto la extensión del mal como la sobreabundancia de la gracia. Aunque el pecado abunde, la gracia de Dios supera con creces cualquier maldad. Es en Cristo, nuestro único Vencedor, que encontramos la respuesta a la cuestión del origen del mal (cf. Lucas 11,21-22; Juan 16,11; 1 Juan 3,8).
Aunque el mal sea una realidad dolorosa y desconcertante, nuestra fe nos invita a confiar en la abundancia de la gracia divina. A través de la conversión al Dios vivo y la revelación de su amor en Cristo, encontramos esperanza y consuelo en medio de la lucha contra el mal. En futuros blogs, exploraremos más a fondo el misterio del mal y cómo la gracia de Dios nos acompaña en nuestra búsqueda de la plenitud y la redención.
Los invito a leer el Catecismo de la Iglesia Católica (La Caída): https://www.vatican.va/archive/catechism_sp/p1s2c1p7_sp.html